Nos encontramos en una situación complicada debido a la nueva pandemia que se está extendiendo a nivel mundial, por lo que es de vital importancia seguir al pie de la letra todas las medidas que se nos proponen para ponerle remedio.
La higiene es un factor determinante en todo esto. Si salimos de casa, debe ser siempre con guantes y mascarilla, y evitando por completo las grandes acumulaciones de personas. Además, los expertos recomiendan que no se haga uso del dinero en efectivo al pagar nuestras compras, sino que se utilicen tarjetas de crédito o débito. De esta manera evitaremos establecer contacto físico con la persona que nos atiende, y reduciremos las probabilidades de contagio.
Se trata de una medida que puede parecer bastante extremada, pero la situación lo requiere. Hay que tener en cuenta que no sólo nos exponemos a nosotros mismos, sino a la gente de nuestro alrededor, como familiares o amigos. Y el riesgo de mortalidad es superior en personas que sean factor de riesgo, y todos conocemos a alguien que lo sea, si es que no lo somos nosotros mismos. Por eso es mejor tener una buena prevención y respetar la cuarentena.
Higiene y prevención
Desde la Organización Mundial de la Salud se aconseja que después de estar en contacto con monedas y productos que provengan del exterior, se desinfecten bien las manos y no se toque nada, ni la cara ni el pelo ni objetos de la casa. Si no se dispone de una tarjeta de crédito o débito, se puede contactar con la entidad bancaria en cuestión para que envíe una a nuestro domicilio.
En este caso ocurre lo mismo que con los productos que se compran en el supermercado. Una vez que lleguemos a la vivienda, hay que proceder a realizar una buena desinfección, porque no sabemos el contacto que han tenido otras personas con ese mismo producto, incluso es posible que alguna estuviera contagiada y no lo supiera todavía. El Covid-19 es un virus extremadamente contagioso, por lo que acudiendo al refranero español, más vale prevenir que curar.
Los expertos respaldan esto, afirmando que los billetes o las monedas pueden llevar bacterias o virus, como cualquier otra superficie con la que un gran número de personas entran en contacto. Sin embargo, el riesgo que supone manipular un billete no es mayor que tocar cualquier otra superficie común, como pasamanos, pomos de puertas o tarjetas de crédito. Por eso la higiene es tan importante.
Países como China o Corea ya se han sumado a la iniciativa de desinfectar y aislar el dinero en efectivo que ha estado circulando durante la pandemia, para tratar de evitar la propagación del virus en la mayor medida de lo posible. Para averiguar si los billetes o las monedas estaban infectadas, las autoridades los examinaban con rayos ultravioleta, y tras su correcta desinfección se ponían en circulación tras 14 días aislados.
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