Las diferencias de servicios entre las tarjetas orientadas a las compras (aunque permitan su uso para la extracción de dinero) realmente son pocas, por ello, no resulta muy sencillo un análisis no repetitivo de un producto, como resulta este tipo de tarjetas bancarias, que realmente responden casi siempre unas características muy parecidas.
La Tarjeta Golden Banco de Valencia como vemos a continuación, si presenta algunas características particulares. Estamos ante una tarjeta que permitirá la realización de compras en comercios así como la extracción de efectivo en cajeros, para posteriormente los pagos correspondientes de manera aplazada, siempre a partir de la misma mensualidad y en función del límite de crédito que la entidad proporciona, como de costumbre vinculado tanto a la solvencia del usuario como a su vinculación con la entidad.
Nos encontramos con una tarjeta gratuita el primer año, y la renovación, en caso de uso, será también exenta de costo, no existe tampoco comisiones de cancelación, amortización parcial o cancelación, por tanto, independientemente de los plazos elegidos para el abono de lo dispuesto, la cancelación total de la cantidad no supondrá comisión alguna.
Dentro del apartado de la cuota mensual de amortización fija, ésta dependerá de manera directa de los límites concedidos, siendo de 30 € por cada 1000 € de límite, y aplicándose de manera independiente al ser lo dispuesto, formada en este caso por capital más intereses del periodo.
El interés que la tarjeta aplica a las compras aplazadas es del 1% nominal mensual, un interés atractivo en comparación otros productos similares que encontramos en el mercado. Por otro lado nos encontramos con una tarjeta que realmente puede ser utilizada de manera complementaria a otras tarjetas de crédito, ya que, presenta un crédito constante que va evolucionando en función de las disposiciones y las amortizaciones, y que al presentar una cuota constante (siempre la misma) permite una planificación mejor de los gastos por tarjetas.
El producto es aceptado en comercios de todo el mundo y cajeros que presentan el distintivo VISA y como vemos se trata de una tarjeta muy apropiada para compras concretas de pago aplazado, pudiendo en este caso ocupar el lugar de otros modelos de financiación como pueden ser los préstamos.